En la China de la dinastía Ming, Gu trabaja como pintor y lleva una vida tranquila junto a su madre. Hasta que conoce a una misteriosa joven, hija de un policía asesinado, que es perseguida por unos agentes que intentan erradicar todo rastro de su familia.
A Touch of Zen es a la obra cinematográfica de King Hu lo que Érase una vez en el Oeste es a la de Sergio Leone: la suma perfecta de tópicos, rasgos y estilo que define una visión del cine y del mundo. En este relato acerca del heroísmo y los cimientos de la mitología, Hu alcanza su punto máximo de condensación y abstracción formal, transformando los cuerpos, espadas y espacios físicos en la materia prima con la cual construir una reflexión sobre el placer del movimiento. La escena que cierra la primera parte del fim debería listarse obligatoriamente entre las más bellas de la historia del cine. Con sus breves tres horas de duración, la primera película taiwanesa de la historia en viajar a Cannes ha influenciado secreta y abiertamente a decenas de realizadores y films posteriores. No verla en esta versión restaurada primorosamente es un pecado mortal. Diego Brodersen
D, G: King Hu F: Hua Hui-ying E: King Hu, Wang Chin-chen DA: Chen Shang-lin S: Chang Hua M: Wu Ta-chiang, Lo Ming-tao P: Hsia-wu Liang-fang, Yang Shih-ching PE: Sha Yung-fong CP: Union Film I: Hsu Feng, Shih Chun, Bai Ying
Taiwan Film Institute. Howard Yang T +886 2 2392 2008 E howardaustin0911@mail.tfi.org.tw W tfi.org.tw